martes, 12 de agosto de 2014

Entrevista Travesía oceánica Premia de Mar (Barcelona) - Santa Marta (Colombia)





Entrevista realizada por mí amigo Vicens Canals, para compartir con los menores y compañeros, con los que trabajamos, en el marco del centro Can Rubió,  de lo que fue la Travesía 2012 en "La Nao Cacao" de Premía de Mar Barcelona a Santa Marta Colombia...5500 millas náuticas....! Agradecimiento enorme a Vicens que estuvo a nuestro lado acompañándonos y disfrutando desde nuestra travesía su amor por el mar y la navegación....! Entrevista que me sirve de voz y memoria para contarle a mis amigos y familia mí empuje por el mar y los veleros.

lunes, 21 de julio de 2014

Catamaran Lagoon 380 Barcelona- Mallorca.Julio/14

     

                                                                       El "Callandre"

Eslora.....12 metros
manga......7 metros
Dos motores, uno en cada patín de 34 caballos.
4 camarotes cada uno con baño
y muchos extras que hacen de esta embarcación un verdadero lujo...!






Nunca había navegado en un catamaran...Tuve la oportunidad de ir cuatro días como tripulante en esta maravilla de embarcación en un travesía de 100 millas náuticas entre Barcelona y la bahía de Pollensa Mallorca...



Zarpamos el 10 de julio sobre las 20:00 pm. El Patrón Luis Cotero, un navegante con mucho oficio y soltura náutica...De esos patrones para quien la tranquilidad y la seguridad marcan su estar en el la embarcación, Para  los que "siempre hay tiempo" y trasmiten al resto de la tripulación la sensación de estar gobernando la embarcación sin agobios, permitiendo que cada uno encuentre su lugar en la travesía y  empiece a disfrutar a su manera la maravilla de navegar.


Tres de las tripulantas celebraban los 60 años de una de ellas y habían decidido para celebrarlo realizar una travesía a las islas en un catamaran. Su adaptación a al vida de abordo  y su estar en el mar se realizó sin dificultad...A las pocas horas de zarpar y una ves superado esos primeros momentos de malestar, ya estaban amarinadas y disfrutando de esta aventura que habían decidido vivir...
Siempre he pensado que navegar no se corresponde con la idea de navegar y normalmente cuando nos embarcamos en una embarcación por primera ves, el malestar físico hace presencia y nos empuja a desembarcar y abandonar...Necesitamos un tiempo de adaptación, un tiempo de comprensión para llevarnos bien con el mar y entender que somos fundamentalmente seres de tierra que estamos invadiendo el habitad del mar y sus caprichos no siempre predecibles por el hombre el tiempo... Este es el precio que la mar nos cobra  para  poder disfrutar de ella. Una ves amarinados no defrauda navegar y como un tóxico de los más adictivos nos hace repetir y repetir y repetir.

 Después de 17 horas ya divisábamos cabo de Formentor. Durante el día había estado soplando un SE entre 15/20 nudos, que al final de la tarde callo, pero dejo en un primer momento una mar formada que hizo de estas primero millas una navegación para las tripulantas poco cómoda. Entrada la noche los vientos del W se fueron imponiendo y con una mar que nos empujaba de aleta  nos permitió acercarnos a Mallorca de manera placida. La estabilidad del catamarán con olas portantes hacen la vida a bordo bastante sencilla y placida.
La derrota tomada entre Barcelona y Mallorca estaba justo en una especie de canal que no estaba afectada por una tramontana anunciada que empezaba a soplar y afecta sobre todo rumbos más cercanos a Menorca   y un mistral que   soplaba más al sur y con fuerza desde Tarragona.
Las guardias nocturnas las hicimos cada dos horas, izamos el Genova al amanecer y con el motor a 1500 revoluciones navegábamos a una media de 6/7 nudos. Gobernar el catamarán es bastante placentero, quizás y sólo por poner un pero, es la poca visibilidad desde el puesto de mando y la rueda de toda la embarcación. Panorámica que si se tiene en en los mono cascos y que en un catamarán te obliga estar siempre a la rueda que es de donde se tiene mayor visión. Exceptuando esta apreciación, la comodidad de su bañera, la amplitud del salón, lo confortable de los camarotes, hacen de este tipo de embarcación un lugar idóneo para largas travesías..Los vientos portantes son los suyos, pues dada sus características ceñir no es su mejor rumbo para navegar..!

La noche se hizo corta, el silencio de la guardia, la estela de las millas dejadas por la popa, una que otra ola que golpea el casco más de lo habitual provocando un ruido que sobresale en esa banda sonora que interpreta cada embarcaciones en sus  travesías. La guardia es un ejercicio de escuchar  esta música y estar pendiente de otras embarcaciones  y  sus señales luminosas para descifrarlas y evitar un  rumbo de colisión.



Destacar la destreza de Luis a la hora de realizar la maniobra de atraque al pantalán, pues el fuerte viento no ayudo mucho...La independencia de las hélices, gracias, a sus dos motores y el buen calculo de Luis fueron calves para atracar  al primer intento.





No conocía la bahía de Pollensa, es una bahía amplia y protegida de los vientos del norte. Es muy buen lugar de recalada en una travesía hacía las islas..A parte de los amarres que ofrece el club náutico, se puede fondear sin dificultad.
En algunas de sus calas hay boyas de diferentes colores, en las cuales te puedes atar, dependiendo la eslora de la embarcación.



De los dos días en Pollensa me quedo con las ganas de regresar y poder disfrutar más de esta bahía, es un sitio maravilloso para pasar una temporada fondeado.Es  un lugar muy visitado por turistas y ofrece de todo un poco....
Carmen, la cumpleañera, tuvo el detalle de invitarnos a una "Caldereta". Plato típico de las islas. Una especie de sopa de cangrejo que te hace sudar de alegría de lo rica que esta.




En el  regreso a Barcelona tuvimos muy poco viento y sólo dos cosas por destacar:
 Un atardecer ocre y naranja y una mar plana como un espejo que daba la sensación de estar navegando sobre un lago. Esta ves toco disfrutar de la cara amable y dormida del mar...!

En mis diferentes travesías no recuerdo un mar tan plano y durante casi toda la noche....!
Luis

Las tripulantas
Disfrutar del mar desde la red de proa del catamaran y ver como el agua circula entre los dos patines es una experiencia que no tiene precio.....
Navegar en un catamaran es una experiencia de confort náutico.....También pienso que el paradigma de navegar no lo da estas lujosas y cómodas embarcaciones, lo da el barco que tengas, con lo que tengas, con tu sello personal, haciendo de la embarcación casi una extensión de tu cuerpo....Como diría  Benedetti : " Con sabanas que bueno, sin sabanas de igual..."





Mar en calma




A la llegada a Barcelona, un tornado se formo a unos 500 metros de nuestra derrota. Nunca había visto un tornado en directo y tan cerca. La tranquilidad reflejada en el rostro de Luis hizo de este fenómeno natural un espectáculo para ver y no una amenaza latente para la seguridad.
El regalo....!
Por último dar las gracias a Jordi Villar por ponerme en contacto con Luis Cotero...Fue una buena oportunidad de volver a dejar la tierra por la popa y desde la comodidad de este catamaran adentrarme una ves más en las maravillas casi oníricas de alta mar....!